Escena cuántica imaginaria para mejorar la autoestima

La autoestima es el reflejo interno de nuestro valor, pero a menudo se opaca por dudas, comparaciones, críticas o ecos traumáticos del pasado. ¿Y si pudieras elevarla en cualquier momento, sin esfuerzo, mientras tomas el desayuno, viajas en metro o esperas en la cola del supermercado? La Escena Cuántica es una herramienta simple: una imagen mental breve que reconfigura tu Campo Cuántico de Información, o CCI (el tejido cósmico, dinámico y mutable, que recoge la información de todo lo manifestado). Una metodología sencilla que se sirve de la imaginación y la intención para transformar cómo te ves a ti mismo.  

Cómo practicarla:

Imagina esto: estás en la cocina cortando verduras, y un pensamiento crítico (Ya no soy tan atractiva como hace unos años) cruza tu mente unido a una emoción de tristeza. O le dices a tu hijo que ordene su habitación y te ignora (No tengo autoridad sobre él porque valgo poco). Detente un segundo y visualiza un espejo brillante frente a ti. En él, te ves rodeada de una luz dorada que surge de tu corazón, como una tenue brasa que se reaviva al soplar sobre ella. La luz crece un poco, cálida y firme, y te dices en silencio: YO SOY valiosa tal como soy. Tu reflejo sonríe, y entonces sientes un fuego amable que inunda tu pecho. La imagen se desvanece, pero esa calidez emocional permanece. Así que, en apenas 10 segundos has reconfigurado tu CCI. Una reconfiguración que modifica en un instante la información sobre ti misma mediante la suma de imagen mental, decreto y emoción. 

O supón que vas en el metro, rodeada de desconocidos, y te sientes pequeña. Cierra los ojos un instante (o sin cerrarlos) y repite la escena: espejo, luz dorada, YO SOY valiosa y me amo, sonrisa, fuego amable, calidez emocional remanente. La multitud sigue ahí, pero tú te sientes más sólida, como si una onda cálida y dulce te recordara tu lugar en el mundo. No necesitas relajarte ni respirar de forma especial; la escena actúa sola, como agua que fluye sin esfuerzo, reconfigurando tu CCI, y, con él, tu vibración interna.

Puedes usar escenas de este tipo al despertar, antes de una reunión, frente a una situación conflictiva o cuando experimentes una emoción dolorosa. Cada vez que utilizas tu conciencia para imaginar una escena cuántica, reconfiguras y mejoras tu subcampo cuántico de información.

No se trata de escapar de la realidad, sino de transformarla desde dentro.

Con tu mente creativa y tu corazón amoroso.

Comentarios