Quien a buen árbol se arrima...

En el Universo, todo lo que se manifiesta es energía y es, al mismo tiempo, información. Y cada objeto inanimado, y cada ser viviente, vibra con su propia personalidad. 

Cuando nos arrimamos a un árbol, y pasamos tiempo junto a él, nos impregna con su forma de ser y con su esencia. Y en la medida en que compartamos espacio y tiempo con él, como en una especie de ósmosis, tanto más iremos adquiriendo sus cualidades y sus virtudes, hasta que éstas se integren en nosotros. Hasta que formen parte de nuestra propia personalidad, de nuestro ser.

Por ejemplo:

  • OLIVO: Nos ayudará a reponer fuerzas cuando nos sintamos cansados física o mentalmente.
  • ALBARICOQUERO: Para la agitación mental, cuando hay una sensación de estar sobrepasado o saturado a nivel psicoemocional.
  • ÁLAMO TEMBLÓN: Cuando sintamos miedo a lo desconocido o un miedo sin motivo aparente.
  • HAYA: En esos momentos en los que nos sentimos invadidos por una marcada necesidad de juzgar o criticar a los demás.
  • ALMENDRO: Para todos los temores y bloqueos emocionales que tengan que ver con el desarrollo y la madurez; niños que “no quieren crecer”, ancianos que “no quieren envejecer”... 
  • CIPRÉS: Ayuda a conectarnos con lo superior, con lo elevado, con lo divino, con lo espiritual, con nuestro superyó.
  • MANZANO: Cuando nos sentimos mental o emocionalmente sucios, nos ayudará a limpiarnos.
  • OLMO: En esos momentos en los que nos sentimos abrumados ante un exceso de trabajo o de responsabilidades.
  • LIMONERO: Ayuda a mejorar la capacidad intelectual. Incrementa el sentido de lo racional y estructural. Mejora la claridad de pensamiento. 
  • ALERCE: Para los que no confían en sí mismos y se anticipan al fracaso.
  • ROBLE: Nos dará fuerza para ser capaces de marcarnos límites a nosotros mismos.
  • PINO: Para aquellos que se sientan culpables o indignos.
  • CASTAÑO ROJO: Para los que se preocupan demasiado por los demás.
  • NOGAL: Cuando necesitemos sentirnos protegidos.
  • HIGUERA: Para bloqueos y temores ocultos alojados en el inconsciente. De ayuda en personas con tendencias obsesivas. 
  • SAUCE: Para las personas que viven amargadas y resentidas con las adversidades que les ha tocado vivir.

Comentarios