Cocina y prosperidad

Simbólicamente, la cocina tiene mucho que ver con la abundancia, la riqueza y la prosperidad.

En ella, elaboramos lo que comemos. Y lo que comemos representa lo que vivimos. Es decir, las experiencias que alimentan nuestro espíritu.

Por ejemplo, si añadimos un puñado de semillas a una ensalada esas semillas simbolizan abundancia. Porque, por pocas que sean, siempre son muchas.

Asimismo, si utilizamos un aceite virgen de excelente calidad, en vez de un aceite refinado, estamos representando riqueza en nuestras vivencias. Pues ese aceite rico aliña nuestra vida y lo que en ella sucede (el alimento que comemos).

Si ponemos nuestra atención, nuestra conciencia y nuestro amor en los alimentos que preparamos, hacemos que éstos prosperen, y que los platos resultantes, por consiguiente, simbolicen prosperidad.

Por lo tanto: 

• Conviene que la cocina esté siempre limpia y ordenada (favorecemos el orden y la fluidez de nuestras finanzas).
• Saquemos la basura a diario (así evitamos perjudicar nuestra economía).
• Evitemos acostarnos dejando platos sucios (simbolizan aquello que está pendiente de hacer y que es necesario hacer para todo esté en su sitio).
• No tengamos en ella relojes parados ni electrodomésticos estropeados (representan estancamiento, falta de fluidez y aspectos de nuestra realidad que no funcionan).
• No guardemos vajilla rota (si queremos que todo vaya bien).