De cómo una aldea abandonada se convierte en un lugar habitado, ecológico y autosostenible.

Volver al campo es el sueño de muchos urbanitas que, por hache o por be, están cansados o saturados de la vida en la ciudad. El sueño de muchos, como digo, pero una realidad para quienes se atreven a dar el paso y comenzar una nueva vida en el medio rural.

En este vídeo de faircompanies.com se cuenta la historia de un grupo de jóvenes sin dinero que, accidentalmente, se encuentran con una aldea abandonada en en norte de Navarra. El caso es que se enamoran del lugar y deciden instalarse allí sin, prácticamente, recursos.

Contra todo pronóstico, salen adelante y prosperan, y desde ese planteamiento de vida comunitaria en armonía con la Naturaleza consiguen un nivel de bienestar que más de uno envidiaría.

Si por una de aquéllas, se os pasa por la cabeza la idea de iros a vivir a una aldea abandonada, quizá os interese saber que en España quedan unas tres mil.

Hay para todos...

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