Pilas recargables

Desde que el euro entró en escena, la inmensa mayoría de precios se ha incrementado de un modo que, en muchos casos, bien podría calificarse de inmoral (un quilo de tomates más de quinientas pesetas; por ejemplo). Y las pilas, evidentemente, no iban a ser una excepción a esta regla.

Una vez me arriesgué a comprar unas baratas a un vendedor ambulante que ofrecía su mercancía frente a la Estación del Norte de Valencia. A lo que, ya subido al tren, ¿sabéis cuánto duraron en mi discman? Pues menos de un minuto. Pero, anécdotas aparte, si lo que pretendemos es ir sobre seguro invirtiendo en unas buenas alcalinas, preparad como mínimo 3 euros por un paquete de 4. Y, desde luego, por mucho que duren, más tarde o más temprano, terminarán agotándose. Tampoco hace falta que os diga, a estas alturas, lo mucho que contaminan.

Ahora imaginad unas pilas potentes que os costasen 12 o 15 euros el paquete de 4 (añadid otros 10-15 euros para el cargador) pero que pudieran recargarse hasta 1000 veces. ¿No valdría la pena invertir en algo así? A mí me parece que sí. Además, en muchas tiendas y grandes superficies podréis encontrar ofertas en las que algunas marcas de renombre venden pilas y cargador juntos por un precio muy asequible. No obstante, no olvidéis que cuando las pilas recargables agotan su ciclo vital también hay que reciclarlas.

Os diré, asimismo, que, normalmente, la capacidad de una batería recargable se mide en miliamperios (mA). Y que para la típica pila pequeña de 1,5 voltios, digamos que más de 2500 mA es una buena capacidad (ésta, obviamente, se va incrementando conforme va avanzando la tecnología).

Luego, en lo relativo a los cargadores, podréis encontrarlos de carga normal (12, 14, 16 horas) o rápida (15 ó 30 minutos, 1 hora, 2, 4). Ahora bien, cuanto más rápidamente se cargue la batería, más se acorta su vida. Pero aunque una pila recargable sufra muchas recargas, y aunque éstas sean muy rápidas, si es de calidad, tendría que duraros, por lo menos, entre 500 y 650 recargas. Eso, como mínimo.

Y en lo concerniente a la ecología, y para no extenderme demasiado en cuestiones científicas, pensad lo siguiente: suponiendo que tengáis el buen hábito de reciclar las pilas, ¿qué vale más, reciclar una o reciclar mil? ¿Y el dinero que uno se ahorra al comprar una y no mil? ¿Y los viajes a la tienda para comprarlas?

Es que, lo miréis como lo miréis, si hablamos de pilas recargables, prácticamente todo son ventajas.

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