Perlizadores

Entre 18 y 25 litros de agua por ducha, entre 50 y 100 para lavar y aclarar el coche con la manguera, de 10 a 20 litros en una fregada... Es lo que se gasta en agua habitualmente, y en una casa cualquiera. Luego, hay que multiplicar esas cifras por el número de habitantes, y añadir el agua que consume la lavadora, la vaporeta, la cisterna del retrete, etc.

Lo que os propongo hoy es un simple artilugio que podréis comprar en, prácticamente, cualquier ferretería o gran superficie, y que os permitirá ahorrar hasta un 50% de agua en los grifos y en la ducha (existen modelos para ambos) sin perder en ningún momento la sensación de presión. Se trata de los perlizadores.

No hace falta que llaméis a un fontanero para instalarlos. Basta con enroscarlos al grifo (sólo hay que tener en cuenta el tipo de rosca), a la ducha o a la manguera, y ya está. Lo único que hará el perlizador será mezclar aire con agua pero sin perder volumen ni presión. Incluso notaréis una especie de efecto hidromasaje al usar la ducha, debido a las abundantes burbujas.

Perlizadores: una manera sencillísima, barata y ecológica de ahorrar hasta un 50% de agua, dinero en las facturas, y, por supuesto, de evitar el despilfarro de este preciado recurso.

Os recomiendo, particularmente, los de la marca Perlaqua (10 y 15 euros cada uno), aunque probablemente encontraréis otras de calidad en el mercado.

Ah, y no los confundáis con los limitadores de caudal o con los atomizadores, que son algo distinto.

Comentarios